El cambio de paradigmas que requiere el riego de precisión

Orígenes del riego de precisión

La tecnología del riego por goteo fue inventada en Israel por el ingeniero Simcha Blass, cuyo primer sistema experimental se estableció en el Kibboutz Hatzerim allá por 1959. De esta manera se dio inicio al riego de precisión moderno, cuya ventaja principal es la aplicación de agua y fertilizante, en las dosis exactas que requieren las plantas, a pesar de lo cual, 60 años después, aún existe una cierta resistencia para la adopción de un sistema de riego de precisión.

Antes del desarrollo del riego por goteo de Netafim se dieron algunos avances iniciales en el tema. Se sabe que en 1860 investigadores alemanes construyeron y probaron tuberías de arcilla con orificios, para hacer riego por subirrigación. También alrededor de 1920, O. E. Robey experimentó con una tubería de tela porosa en la Universidad de Michigan, Estados Unidos.

Sin embargo, hasta antes del desarrollo realizado por Simcha Blass, todas las variantes de tuberías probadas se basaban en el principio de liberar el agua por orificios minúsculos, siendo el principal problema el hecho de que dichos orificios se tapaban con mucha facilidad debido a la acumulación de diversas partículas. Además, otro problema, que no era menor, era que la presión de salida del agua era poco uniforme.

La gran innovación realizada por Simcha Blass consistió en utilizar emisores o goteros, dentro de los cuales el frotamiento ralentiza la velocidad de salida del agua, permitiendo uniformizar el goteo; además, como el canal dentro del emisor tiene un tamaño mayor, el taponamiento de los goteros también disminuye considerablemente.

La necesidad como motor para la innovación

El hecho de que el riego por goteo haya surgido en Israel no es casualidad, pues se trata de un país con escasos recursos hídricos, donde de mayo a septiembre las lluvias son muy escasas, lo que les ha obligado a desarrollar tecnologías para el ahorro de agua, en especial para maximizar el uso del agua con fines agrícolas.

Ahora bien, en todo el mundo se conoce el riego por goteo, y México no es la excepción, sin embargo, aunque el riego de precisión en general, y el riego por goteo en particular, tienen enormes ventajas, lo cierto es que aún existe una cierta resistencia a utilizar este tipo de sistemas de riego que permiten utilizar de manera eficiente el agua.

El caso de México es bastante interesante, pues como sabemos, debido a la geografía nacional, tenemos una división muy marcada en el tema del agua para uso agrícola, existiendo en los estados del norte un déficit de agua, mientras que en los estados del sur el agua parece no ser un problema al mismo nivel. Esto se puede comprobar al analizar la diferencia en el porcentaje de la superficie de riego y de temporal entre algunos de los estados del sur y del norte del país.

Tabla 1. Agricultura de riego y de temporal de algunos estados de México.

Fuente: Infografías agroalimentarias por estado del SIAP.

Principales paradigmas que necesitan superarse

“El riego de precisión es caro”. Puede parecer que la inversión inicial para instalar un sistema de riego de precisión es elevada, pero la escasez de agua que este 2021 se ha tenido en México, con un 75% del país bajo condiciones de sequía, según la Conagua, muestra que el cambio climático está generando condiciones en las cuales, estar a expensas del agua de temporal podría ser muchísimo más costoso para los agricultores, pues las pérdidas de cosechas podrían ser hasta del 100%.

Además, hay que considerar que el precio del agua para la agricultura actualmente es muy bajo, lo que ha permitido que su desperdicio no sea una preocupación para la mayoría de los actores de la agroindustria, siendo que se trata de un recurso de un valor incalculable, dada su importancia, ya no digamos solo para la agricultura, sino para la humanidad en su totalidad.

“Los sistemas de riego de precisión requieren muchas reparaciones”. He aquí otro de los grandes paradigmas a vencer, pues hay que hacer ver a los agricultores que el éxito de un sistema de riego de precisión radica en su mantenimiento preventivo, el cual por supuesto siempre será mucho más redituable que las reparaciones ya cuando se tienen los problemas, los cuales, por cierto, casi siempre derivan de un mantenimiento deficiente.

Es más, un sistema de riego de precisión al cual se le dé el mantenimiento adecuado funcionará con total confiabilidad, que es lo que se necesita en campo. Sin embargo, cambiar la mentalidad de los agricultores para hacerles ver que es más redituable el mantenimiento preventivo que las reparaciones correctivas no es sencillo, porque en el sector agrícola todavía estamos muy adecuados a no poner dinero en nada hasta que sea absolutamente necesario.

“Un sistema de riego de precisión es complejo”. La realidad es que si se cuenta con la asesoría adecuada no hay nada de complejo en un sistema de riego de precisión, ni en su instalación ni en su funcionamiento. Además, en Netafim brindamos asesoría técnica especializada, por lo que en todo momento los agricultores cuentan con el respaldo de nuestros ingenieros y técnicos.

“Para que quiero un sistema de riego si tengo mucha agua disponible”. Durante los últimos años el cambio climático ha comenzado a afectar la distribución de los recursos hídricos en todo el mundo, lo que implica que zonas agrícolas que históricamente eran abundantes en agua ahora están padeciendo los efectos de sequías severas. Además, hemos visto como en ciertas zonas de importancia agrícola, la temporada de lluvias es cada vez más errática, por lo que la agricultura de temporal está adquiriendo un mayor nivel de riesgo.

“Me parece muy poca el agua que se aporta con un sistema de riego por goteo”. Muchos agricultores todavía consideran que deben aportar una gran cantidad de agua a su cultivo, cuando la realidad es que la mayoría de los cultivos disminuyen su rendimiento cuando se desarrollan bajo condiciones de exceso de agua. De hecho, son muy pocos los cultivos que se desarrollan bien en condiciones de anegamiento, siendo el más conocido el arroz, pues la mayoría se ven afectados cuando sus raíces están sumergidas en el agua, en especial si esto ocurre por varias horas.

Lo que sucede es que cuando se riega en exceso un cultivo los espacios porosos se llenan de agua y desplazan al aire, condición bajo la cual ocurre la hipoxia y las raíces empiezan a morir por falta de oxígeno. Es por ello por lo que el riego de precisión ha tenido tanto éxito, ya que permite llevar el agua y los fertilizantes a donde realmente se necesitan, sin tener excesos de humedad que afecten al desarrollo de las raíces.