El riego de precisión será clave en la agricultura sustentable
En las próximas décadas la agricultura mundial tendrá que afrontar y superar varios retos prioritarios, entre los cuales destaca la producción sustentable de alimentos, un concepto que a grandes rasgos implica aprender a producir más, pero utilizando menos recursos y cuidando al medioambiente, sin dejar de poner atención en la calidad y seguridad de los alimentos que se producen.
En este contexto, el manejo adecuado del agua de riego será una de las mayores necesidades, y para maximizar su uso se requerirá implantar sistemas de riego que nos permitan evitar cualquier tipo de desperdicio, así como aplicar solamente las cantidades justas de agua que necesitan los cultivos según la etapa fisiológica en la que se encuentren, considerando también el tipo de suelo y el clima de la zona, además de algunos otros factores.
¿Qué es la agricultura sustentable?
Cada vez escuchamos con más frecuencia el término “agricultura sustentable” y no es para menos. Todos sabemos que el cambio climático ya está afectando a la agricultura en muchas regiones del mundo, marcando diferencias entre quienes pueden utilizar alguna estructura de protección y quienes no, pero también hay que considerar que la desigualdad en el acceso a alimentos de buena calidad está generando una brecha cada vez más visible entre los países ricos y pobres.
No hay que olvidar que, aunque no lo parezca, hemos comenzado a afrontar el mayor reto de nuestra historia como humanidad: alimentar en los próximos 30 años a casi 9,000 millones de personas. Se trata de un reto de dimensiones nunca visto y según nuestros avances actuales, es muy posible que no lo superemos con éxito, lo que resultaría en hambrunas en los países más desprotegidos, alimentariamente hablando, entre muchas otras problemáticas de alcance mundial.
Es posible que fallemos porque todavía no terminamos de entender que los recursos para la producción agrícola son finitos y ya estamos llegando a un punto de sobreexplotación que pone en riesgo la agricultura como la conocemos actualmente, sino a nivel global, al menos si en muchas de las regiones agrícolas importantes del mundo. Es por esta razón que la agricultura sustentable ha comenzado a tomar fuerza.
Cuando hablamos de agricultura sustentable estamos haciendo referencia a varios requisitos que deben de cumplirse: 1) sistemas de producción capaces de mantener la productividad y rentabilidad de las parcelas agrícolas, 2) que a su vez permitan abastecer de alimentos seguros y de calidad a la población, 3) con precios razonables para evitar la desigualdad en el acceso a los mismos y 4) que permitan mantener los ecosistemas naturales en equilibrio, mediante la gestión adecuada del suelo, agua y otros recursos.
Ahora bien, la gran limitante para implementar la agricultura sustentable es que, de manera general, nos cuesta mucho implementar sistemas de producción que integren distintos objetivos al mismo tiempo, de modo que hay que cambiar muchos paradigmas de la agricultura actual si queremos cumplir con el gran objetivo que tenemos frente a nosotros.
La ineficiencia en el uso del agua en la agricultura es abrumadora
La sostenibilidad de la agricultura debería convertirse en uno de los pilares de la agricultura de las próximas décadas, y en este sentido el riego de precisión jugará un papel fundamental para lograr producir alimentos de manera sustentable.
Las estimaciones más recientes de la FAO (1) indican que para poder alimentar a 9,000 millones de personas la producción de alimentos deberá incrementarse en un 70% para 2050, en comparación con lo que se produce hoy en día. Sin embargo, la gran pregunta es: ¿cómo vamos a producir todo ese alimento extra si los recursos disponibles ya están al límite? Además, también debemos de empezar a proteger al medioambiente desde ya, sino queremos afrontar una decadencia de diversos ecosistemas, lo que resultaría negativo para todos.
Y una de las mayores incógnitas es, por supuesto, el tema del agua. Justo en estos momentos México se encuentra atravesando una de las peores sequías de su historia, pues según la CONAGUA (2) el 84% del territorio nacional está en condiciones de sequía, lo que, por supuesto implicará que miles de hectáreas de cultivo se vean afectadas, algunas con pérdidas totales y otras con distintos niveles de afectación respecto a las cosechas esperadas al inicio de la temporada.
Entonces, si no cambiamos la manera en la cual utilizamos el agua en la agricultura pronto vamos a tener problemas aún mayores, porque la agricultura es la actividad humana que más agua requiere. Según estimaciones del Banco Mundial (3), el 70% del agua que se extrae en el mundo se utiliza para la agricultura.
Los mayores problemas que se tienen con el agua de uso agrícola ocurren durante la conducción y aplicación de esta, ya que según datos del Gobierno de México (4), la eficiencia de la conducción puede variar entre 60 y 95%, según las condiciones en las que se encuentren los canales; sin embargo, también durante la extracción y el almacenamiento ocurren pérdidas importantes que hasta ahora poco se han cuantificado, de modo que no hay datos disponibles que nos indiquen la verdadera magnitud del problema.
Y bueno, que decir de las pérdidas durante la aplicación de la lámina de riego. Los valores obtenidos en campo indican que la eficiencia del riego por surcos es de 60%, la de riego por aspersión es de 75% y la de riego por goteo es de 90%, cifras que reafirman la importancia de impulsar el riego de precisión. Aunque claro, estos son datos promedio, pues el Gobierno de México cree que en la práctica la eficiencia en el riego puede ir desde 20% hasta 85%, lo que indica un enorme punto de mejora en este sentido. Además, el promedio mundial de la eficiencia de riego está alrededor del 35%, lo que deja un gran margen de mejora e indica que actualmente no estamos cuidando el agua como deberíamos.
El papel del riego de precisión en la sustentabilidad
Muchas personas creen que al hablar de riego de precisión nos estamos refiriendo solamente al riego por goteo o al riego por microaspersión, pues, aunque estos dos tipos de riego por supuesto están comprendidos dentro del riego de precisión, este no se trata solamente de estos tipos de riego, sino que comprende más aspectos.
De manera general, el riego de precisión comprende un conjunto amplio de tecnologías enfocadas en realizar la programación óptima del riego, para así poder establecer el momento, la frecuencia y el tiempo de riego adecuados, según las características específicas de cultivo, dependiendo de su etapa fenológica, pero también dependiendo de la configuración de la red de riego, el suelo y el clima, de modo que son muchos los factores que hay que tener en cuenta al mismo tiempo.
Eso sí, cuando hablamos del riego de precisión no nos centramos únicamente en el funcionamiento del sistema de riego como tal, como muchas veces se piensa, sino que también hay que considerar la distribución de la humedad en el suelo, para lo cual se necesitan sensores que nos indiquen este parámetro.
De hecho, el primero requisito para incursionar con éxito en el riego de precisión es contar con una adecuada sectorización de la red de riego, con unidades de riego lo más homogéneas posible. Además, también se necesita regular la presión en el cabezal de riego, así como en las líneas primarias y secundarias, tener medidores para obtener datos que permitan definir la frecuencia de riego y obtener el volumen de agua aplicado en cada evento de riego. El tiempo y la frecuencia de riego deben controlarse con un programador y electroválvulas para tener la mayor precisión posible.
Ahora bien, el riego de precisión también debe incluir una metodología para tomar decisiones óptimas sobre los ajustes que se necesitan hacer al riego, y para tomar esas decisiones es necesario contar con un software que permita obtener todos los datos posibles de los diversos sensores, procesar toda esa información y presentarla de manera fácil de revisar.
De esta manera realmente podrás tomar decisiones inteligentes respecto al riego de tus cultivos, al tiempo que cuidas uno de los recursos naturales fundamentales para la producción agrícola.
Ventajas principales del riego de precisión
Actualmente la adopción de un sistema de riego de precisión es una de las mejores inversiones que un agricultor puede hacer, debido a las grandes ventajas que implica poder controlar de manera precisa el agua que se aplica a un determinado cultivo.
La primera gran ventaja de un sistema de riego de precisión es que este permite utilizar de manera más eficiente el agua para riego, lo que a su vez puede aumentar la resiliencia de los agricultores, en especial en zonas donde la sequía es un problema o donde el acceso al agua está restringido. Para esto los agricultores deben comprender que es posible obtener mejores rendimientos con menor cantidad de agua, un cambio de mentalidad que es necesario para dar el siguiente paso.
Si cambiar la forma en la cual se utiliza el agua de riego es todo un reto, cambiar las ideas preconcebidas que indican que “mientras más agua le eche a mi cultivo es mejor”, tiene mayor complejidad, dado que dichas ideas están arraigadas en la cultura de muchos agricultores. Sin embargo, la escasez de nuestro recurso más preciado es una realidad y no podemos continuar con el desperdicio de este.
Otra gran ventaja del riego de precisión es que permite eliminar casi en su totalidad la escorrentía y la filtración profunda, cuestiones que están causando una sobrefertilización de los mantos acuíferos y los océanos, lo que a su vez está generando un desequilibrio peligroso en los ecosistemas acuáticos, cuyas consecuencias ya han comenzado a ser cada vez más visibles. Y gracias al riego de precisión es posible evitar la aplicación de agua excesiva, manteniendo al mismo tiempo una humedad adecuada constante solamente en donde se necesita, es decir, en la zona radicular.
Una ventaja más del riego de precisión es que ayuda a reducir las pérdidas de agua por evaporación, pues se estima que, al utilizar riego por inundación y riego por aspersión, entre un 15 a un 30% del agua utilizada se perderá al evaporarse hacia la atmósfera, cifra que incluso podría ser mayor, en especial en los meses de mayor temperatura máxima. Sin embargo, al aplicar pequeñas dosis de agua cada cierto tiempo, es posible mantener una humedad constante en la zona radicular, sin llegar al punto en el cual el agua se evapore, lo que permite utilizar más eficientemente dicho recurso.
Pero estas no son las únicas ventajas del riego de precisión, pues también está la posibilidad de contabilizar el agua utilizada durante todo el ciclo de cultivo, información que le será de utilidad a los agricultores para conocer sus costos reales de producción. Además, también está el hecho de que un sistema de riego de precisión nos permite aportar los nutrientes necesarios a las plantas, de modo que al aplicar el agua y los nutrientes al mismo tiempo los agricultores pueden ahorrar tiempo y recursos.
Referencias: